El proceso de homologación hasta obtener los certificados de calidad, es largo y complejo. Los equipos se envían a los distintos laboratorios de España y Europa, donde someterán tanto a las placas como a los termoacumuladores solares a pruebas de alto rendimiento. Estas rigurosas pruebas son difíciles de conseguir, pero son absolutamente necesarias, para certificar tanto la calidad mecánica de nuestros equipos, como su resistencia y rendimiento.
Una de las certificaciones más prestigiosas, es la que concede la CENER. No todas las empresas someten a sus equipos bajo las rigurosas pruebas certificadoras, pero la calidad de los equipos solares térmicos que fabricamos, obtuvieron una excelente calificación. Otras certificaciones como las de I.N.T.A., I.T.W o AENOR, avalan también la calidad, resistencia y alto rendimiento de nuestros equipos. Consideramos muy importante, obtener las mejores califiaciones, entre las agencias homologadoras más importantes de España y resto del Mundo. La calidad, debe demostrarse.